La naturalidad dental

Ya sea por una mala higiene o por un suceso traumático, a veces un dentista se ve obligado a sustituir un diente o varios. De hecho, cada vez es más común. Anualmente, en España se colocan unos 800.000 implantes dentales. No sólo eso, sino que esta cifra crece a razón de un 20% anual, un aumento comparable al de países como Estados Unidos.

Estos implantes se componen, habitualmente, de una raíz de titanio puro que, como un tornillo, va anclada al hueso maxilar o a la mandíbula. Y encima de ella, una prótesis que imita al diente desaparecido.

Tradicionalmente, los implantólogos con más o menos pericia no tenían problema en sustituir una, dos o tres piezas dentales por implantes, perosustituir todos los dientes representaba un problema, y sólo dejaba una alternativa: la dentadura postiza de quita y pon, flotando cada noche en un vaso de agua sobre la mesilla. Más que obligar a todo el mundo a lucir la misma sonrisa, como ocurre a menudo en Hollywood, lo que se busca con los nuevos implantes dentales, asistidos por ordenador y con tecnología de impresión 3D, es lograr reconstruir la sonrisa original del paciente. Hoy en día eso ya no es suficiente, los pacientes piden más, piden que el implante no sea sólo un elemento práctico sino que les aporte esa naturalidad perdida, que puedan no sólo masticar sino también sonreír como antes.

sonrisa

Como consecuencia, estas nuevas técnicas hacen de la operación algo mucho menos invasivo y acortan el periodo de convalecencia.

Para desarrollar estos cambios y mejoras en los implantes, las empresas han realizado numerosos trabajos, estudios e investigaciones en colaboración con los dentistas. Estos estudios a largo plazo son los que diferencian a unos implantes de otros y los que dan al profesional y, por ende, al paciente las garantías de que la marca o el tipo de implante que se utiliza es o no fiable.

Aunque todos los implantes comercializados cumplen unos requisitos mínimos para su correcto funcionamiento, avalado por la marca CE, el resultado final a medio y largo del tratamiento con implantes dentales depende de muchos factores.

Los implantes si no se cuidan correctamente, los implantes pueden durar menos de lo previsto. El paciente debe cuidar su boca en general, dientes e implantes, mediante una excelente higiene oral, combinado con visitas periódicas de control y mantenimiento periodontal e implantológico (cada 4-6 meses). Los implantes pueden sufrir inflamaciones (mucositis) o infecciones (periimplantitis) si no se controlan correctamente los factores de riesgo; entre ellos: la correcta higiene bucal, el tabaco y la enfermedad periodontal en los dientes del paciente. Los implantes dentales, bien cuidados, pueden durar toda la vida o, por lo menos, pueden extender su vida media útil durante muchísimos años.